La propuesta de valor es el corazón de cualquier negocio exitoso. Es la razón por la cual los clientes te eligen a ti en lugar de a la competencia. En PRACTIEMPRENDE, ayudamos a los emprendedores a identificar y definir de manera clara lo que su producto o servicio ofrece que otros no pueden. Esto implica centrarse en las necesidades y deseos específicos de los clientes, entregando soluciones que les proporcionen beneficios únicos y relevantes.
Para crear una propuesta de valor sólida, el emprendedor debe responder preguntas clave como: ¿Qué problema específico resuelvo? ¿Qué beneficios principales obtienen mis clientes? En PRACTIEMPRENDE, enseñamos a los usuarios a estructurar estas respuestas, diseñando una oferta que destaque por su valor, siendo capaz de captar la atención de su mercado objetivo.
Por otro lado, la diferenciación es esencial para destacar en un mercado competitivo. Es lo que te hace diferente y especial en relación a otros productos o servicios similares. A través de PRACTIEMPRENDE, los emprendedores desarrollan estrategias para diferenciarse a nivel de producto, servicio al cliente, o incluso en branding. Con esta orientación, el emprendedor no solo compite por precio, sino por calidad, experiencia, y valores añadidos, logrando posicionarse de manera sólida en el mercado.